domingo, 2 de septiembre de 2012

In a heart beat

Darte por vencida, no creer en el amor, ni en flechazos, ni en corazones que palpitan al mismo ritmo, ni en sueños de princesas y de pronto aparece alguien que desmorona tu solida coraza en 4 días, perfecto.

Te habías creado una falsa apariencia de no confiar en nadie, de chica dura inaccesible, con esa armadura preciosa y reluciente que expone tu sonrisa.

Conoces a alguien pero no le das la mínima importancia, ¿para qué?, si tu ya estas convencida de que nunca va a llegar, de que no puedes dar nada, que nadie se lo merece, que ya te han hecho bastante daño. Aunque te lleve las bolsas de la compra y use sus dos horas de descanso en el trabajo para ir a verte y tan solo darte un beso.

Chica tonta estas empezando a ablandarte de nuevo, sube tus escudos y protégete. Una cuarta cita especial, un apartamento, una piscina solitaria, un complejo privado. Risas, miradas, juegos, respeto. Llegas a casa con la sensación de que falta algo, ¡sí!, este chico no se ha aprovechado de ti como el resto, en una intimidad en la que podría haberlo hecho perfectamente.

Y hoy, estresada, con la cama llena de folios, la cabeza totalmente bloqueada, sólo unas horas para los exámenes que te quiebran la cabeza, y suena el móvil.

Alguien ha venido a verte a las 3 de la mañana, sales sigilosa tratando de no despertar a nadie, arriesgándote mucho como nunca lo habías hecho, pero él viene de lejos, no puedo dejarle fuera y decirle que no. Bajas con un moño mal hecho, sin maquillaje y en pijama.

Tres segundos. Sólo tres segundos, tres eternos e interminables segundos tardaste en llegar a donde estaba yo, levantarme en el aire y besarme con toda esa intensidad que desprendes siempre, y tan sólo tres segundos te fueron suficientes para tirar por tierra todas mis armas de mujer y mis corazas. Pero sólo las palabras siguientes a ese beso consiguieron destrozar absolutamente todo aquello de lo que me había logrado convencer a mi misma, y el abrazo siguiente consiguió que dejase de temblar, no se si por el frío o por las emociones que empezaron a brotar en tan solo tres segundos.


No hay comentarios:

Publicar un comentario